Hoy vamos a hablar del parto y la importancia
de que sea una matrona la que te acompañe durante todo el proceso.
¿Qué sería lo ideal? Que te acompañe la matrona
que hayas elegido, con la que tengas feeling.. pero eso normalmente sólo puedes
hacerlo si la contratas de manera privada (o para parto domiciliario o bien
para que esté contigo en el hospital).
Si das a luz en el hospital lo normal será
que te atienda una de las matronas que esté de guardia.
¿Qué
hace una matrona?
Te
acompaña.
Para que el parto progrese es importante que
te sientas segura y te dejes llevar; para reforzar tu seguridad, para tener un
hombro donde reposar, para animarte, para cuidarte… ahí está la matrona.
Comprueba
que todo marcha correctamente.
Escuchará con frecuencia el corazón de tu
bebé en caso de ser un parto normal o bien continuamente en caso de ser un
parto medicalizado (con epidural, oxitocina sintética o bien un parto de riesgo
el cual haga falta monitorizar todo el tiempo).
Irá comprobando que la dilatación avanza
mediante tactos vaginales (en condiciones normales no hace falta hacer más de
un tacto cada cuatro horas).
Te ayudará cada ver que quieras cambiar de
posición, te traerá algo de beber o comer si lo deseas y será tu soporte tanto
físico como emocional.
Le contará a tu pareja todo lo que puede
hacer para ayudarte, será también su apoyo…
Si sientes dolor, te ofrecerá todos los
recursos a su alcance para que puedas mitigarlo: pelota de pilates, cambios de
postura (a gatas, de lado, sentada…), saquito de semillas caliente para la zona
lumbar, bañera/ducha de agua caliente, masajes en la zona sacra, respiraciones,
relajación, uso de la voz para ayudar a la apertura vaginal, oxido nitroso o
incluso anestesia epidural si ese es tu deseo.
Es muy importante elegir el lugar donde vais
a dar a luz en función de cómo queréis que sea vuestro parto; es tan importante
porque actualmente no en todos los hospitales se trabaja de la misma manera y
no todos tienen los mismos recursos; De hecho aún quedan bastantes hospitales
con protocolos obsoletos donde los partos se medicalizan por rutina y la
matrona es desplazada en determinados momentos por el ginecólogo. Eso es un
problema ya que el ginecólogo no es el profesional más adecuado según la OMS y
el Ministerio de Sanidad para atender los partos normales; el médico está
formado principalmente en patología y el parto es un hecho fisiológico que debe
ser atendido por una matrona.
Durante
el expulsivo…
Recoge a tu bebé en la postura que tu hayas
decido tenerlo y sólo en el caso de que compruebe sufrimiento fetal o bien que
el bebé tenga dificultades para salir, llamará al ginecólogo para ayudarte.
Te pondrá a tu bebe al pecho, piel con piel, para
que se agarre a la teta cuando quiera, cubriendo a los dos con toallas y así os
quedareis si todo va bien el máximo tiempo posible.
Mientras el cordón siga latiendo no hace
falta cortarlo, de hecho es mejor dejarlo incluso hasta que salga la placenta,
ya que cuanta más sangre le pase al bebé mejor; además su adaptación
respiratoria será más suave ya que al mismo tiempo que comienza a expandir los
pulmones le está pasando oxígeno a través del cordón umbilical.
La matrona recogerá la placenta cuando salga
y suturará el periné si fuera necesario.
Horas más tarde se pesará al bebé y se le
medirá, sin prisa…
También se asegurará de que estáis bien, ser
madre es el mayor cambio en la vida de una mujer y necesitará un tiempo de
adaptación.
Así pues mi recomendación es: ¡Solicita una
matrona en tu parto!